Eran las 3:30 de la madrugada de este domingo cuando frente a una estación de Gazel ubicada en el barrio San Roque, en el suroriente de Barranquilla , fue asesinado un hombre de unos aparentes 50 años, en medio de lo que pareciera ser un nuevo caso por el cobro de extorsiones en la zona.
El asesinato se registró puntualmente en la carrera 38 con calle 34 del mencionado sector, cuya víctima mortal se trataba de un colaborador que, aunque no trabajaba directamente con la estación de servicios de la empresa Gazel, ayudaba con el suministro de combustible y trabajaba en una llantería cercana al lugar del homicidio.
La víctima recibió dos balazos en la cabeza cuando permanecía en el sitio, al parecer, esperando clientes para despacharles gasolina. Así mismo, trascendió que sobre el cuerpo del hombre reposaba, al parecer, un panfleto alusivo a la banda criminal 'Los Costeños', sin embargo, la existencia del documento no ha sido confirmada aún por las autoridades.
Según la versión suministrada por testigos del hecho, la gasolinera habría sido blanco de un atentado a bala, días atrás, razón por la cual se encontraba bajo vigilancia privada y permanente patrullaje de la Policía Metropolitana de Barranquilla, con el objetivo de salvaguardar la vida de los operarios e 'isleros' que, en las últimas semanas, han sido víctimas de atentados a bala entre Barranquilla y Soledad.
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Sin embargo, todo indicaría que los presuntos sicarios habrían aprovechado que los agentes salieron a realizar una ronda por la zona para cometer el asesinato. Es importante mencionar que son, aproximadamente, siete estaciones de servicio las que han cesado sus operaciones ante la crítica ola de extorsiones que los azota.
Hasta el momento, son alrededor de diez las estaciones de servicio que se encuentran con cese de operaciones entre Barranquilla y Soledad, cuyos atentados ya dejan dos personas muertas y una más herida en casi doce días.
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Es importante mencionar que, debido a la crisis, la mayoría de las estaciones de servicio se encuentran operando tan solo 12 horas al día, desde 7:00 de la mañana hasta las 7:00 de la noche con acompañamiento permanente de la Policía Metropolitana y miembros del Ejército.
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