Al menos ocho clínicas del Atlántico reportan ocupación total y colapso de las áreas de urgencias

Mientras Barranquilla y el Atlántico completan tres días consecutivos acercándose a los 4.000 contagios diarios, la capacidad de atención en las clínicas de la red privada sigue desbordada por la alta demanda de pacientes, en su mayoría, con afecciones respiratorias derivadas del COVID-19.

Las clínicas Bonnadona, General del Norte, Reina Catalina (sedes Barranquilla y Baranoa), La Merced, Clínica del Caribe, la Asunción, Hospital Universidad del Norte (en Soledad) y la Portoazul (en Puerto Colombia), están pidiéndoles a sus usuarios acudir a sus instalaciones sólo en caso de padecer una urgencia vital.

A través de comunicados y letreros fijados en las paredes, estos centros asistenciales invitan a la ciudadanía a recurrir a otros medios de atención en caso de necesitar la valoración de un especialista. Informan que pueden solicitar teleconsultas, atención en casa o trasladarse a las UBA (Unidades Básicas de Atención).

A este problema se suma la preocupación entre los directivos de las clínicas de Barranquilla y el Atlántico por los elevados costos de los insumos médicos ante la alta demanda que se ha desatado con el tercer pico de la pandemia.

El gerente del Hospital de la Universidad del Norte, Diego Castresana, aseguró que el valor de los medicamentos que se usan para la intubación y la sedación de los pacientes aumentó hasta en un 75 %.

"Lamentablemente en el tema económico no hay mucho que hacer, porque las negociaciones que tenemos con los pagadores de los servicios son usualmente anuales, así que este exceso de costos no se puede trasladar a nadie, les toca asumirlo a los mismos hospitales y clínicas. Entonces, les pedimos al Gobierno Nacional, al Ministerio de Salud y la Superintendencia de Salud, ponerle atención al tema, porque es algo crítico", manifestó Castresana.

Los directivos médicos afirman que la situación es compleja, teniendo en cuenta que algunas EPS han tratado de bajar tarifas sin tener en cuenta los altos costos que están asumiendo las clínicas y hospitales. Ante el llamado, la Alcaldía de Barranquilla manifestó que en los próximos días se hará una mesa de trabajo para abordar el tema.

A las clínicas también les preocupa que los proveedores de oxígeno han manifestado que podrían presentarse problemas desabastecimiento.