En tragedia terminó el juego de tres jóvenes que en plena madrugada decidieron apostarle a la llamada tabla ouija para adivinar, primero, cómo estaba su mejor amiga y, segundo, cuáles serían los próximos números ganadores del Baloto.
Después de supuestamente recibir algunas respuestas del más allá, el adolescente Juan David Santana Ospino decidió abandonar el juego, pero tanto él como sus amigos entraron en un estado de desesperación que intentaron calmar con un baño en el río Magdalena.
Después de este repentino baño, Juan David no volvió a salir a flote, contó su madre: "Ellos se fueron para el río a las 3 de la mañana para bañarse. Allí estaban jugando y hablando, pero dicen los otros muchachos que como a las 6 de la mañana mi hijo se ahogó", dijo la mujer.
La madre pide ayuda de las autoridades para hallar al adolescente de 17 años, quien completa cuatro días desaparecido tras haberse sumergido al río, debajo del antiguo puente Pumarejo, que comunica a los departamentos de Atlántico y Magdalena.
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