¿Qué tan difícil es conseguir un arma de fogueo en Bogotá?

Conseguir un arma de fogueo en Bogotá, como las que usaban los tres presuntos ladrones que intentaron robar al médico, que finalmente los mató, puede ser tan fácil como conseguir un artículo deportivo.

BLU Radio llegó a una de las zonas más comerciales de la ciudad para conocer qué tan difícil es conseguir un arma de fogueo. En el sector de San Andresito de la 38 se exponen estás armas como si fuera un supermercado. Es decir, expuestas en vitrinas, con diferentes cartuchos y diábolos, además de miras digitales y otros accesorios para mejorar el rendimiento del arma.

Al preguntar a los comerciantes de la zona por las características del arma, ellos detallan que la tienen clasificada por tres tipos: una de esas es el arma de fogueo, la cual solo emite el sonido y el fogonazo de un arma real, pero no dispara ningún elemento; el segundo tipo es la traumática, un arma que, además de sonar como una real, también dispara balas de salva que causa intenso dolor. Finalmente está el arma de diábolos, que son una especie de conos que pueden llegar a perforar.

Todas estar armas descritas anteriormente son idénticas a un arma de fuego, lo único que se diferencia es que son menos pesadas y, se supone, no son letales, pero en el momento en que un delincuente utilice uno de estos elementos para atracar, la víctima se puede confundir e intimidar a tal punto creyendo que es un arma real.

Al preguntar a uno de los comerciantes por la clase de arma, manifestó que tenía armas de fogueo y traumáticas desde Magnun, Bereta, Magnun 92, tipo Revólver... las traumáticas valen aproximadamente 620.000 pesos y vienen con dos proveedores, una cajita de 50 disparos, manifiesto de importación y carné de tenencia.

Entramos a otro local, en donde las armas de fogueo y traumática, además de escopetas con diábolos, reposan colgadas sobre una pared. En ese lugar, el vendedor explicó: “Es igualita a un arma de fuego, parece una real. Los documentos que le exigen la ley son manifiesto e importación, factura electrónica y carné de Indumil”.

El vendedor también explicó cómo se puede cargar está arma sin tener líos con la policía.

“En un bolso, maletín o canguro porque no la puede llevar ni en la cintura ni en la chaqueta, yo le doy es carné de tenencia”, dijo. Explicó, además, que para adquirir uno de estos elementos solo se necesita el dinero, porque ni antecedentes se verifican.

Lo cierto es que a simple a vista un arma de fogueo o traumática utilizada en medio de una actividad criminal, perfectamente puede pasar como un arma de fuego y, por estas características tan similares, los delincuentes ahora acceden con mayor frecuencia estos elementos para intimidar y hasta herir a sus víctimas, porque, aunque la de fogueo no dispara nada, a cierta distancia si puede quemar a una persona.