La intolerancia entre conductores de ambulancias y el personal médico de emergencia que atiende a heridos en accidentes se ha vuelto un motivo de preocupación. El episodio más reciente de esta problemática fue documentado gracias a una denuncia ciudadana en las redes sociales.
El incidente tuvo lugar en un escenario de accidente de tránsito, donde una persona yacía herida en el suelo. Dos ambulancias llegaron al lugar para brindar asistencia, pero en lugar de trabajar en conjunto, los dos paramédicos a cargo, una mujer y un hombre, se enfrascaron en una acalorada disputa por la atención del paciente.
El paciente, visiblemente incómodo y necesitado de cuidados médicos, se encontró en medio de esta lucha por su atención. Mientras los paramédicos discutían y forcejeaban por subirlo a una camilla, la tensión aumentaba.
Finalmente, el paciente fue atendido, pero la situación empeoró cuando los dos paramédicos comenzaron a agredirse físicamente. Los funcionarios se lanzaron puñetazos y patadas, todo esto mientras el herido continuaba en la camilla.
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Afortunadamente, los ciudadanos presentes en el lugar tomaron medidas para detener la pelea entre los auxiliares médicos, evitando así un desenlace aún más desastroso. Funcionarios de la Secretaría de Movilidad también se encontraban en el lugar y tomaron nota de la situación.
El video de este incidente se viralizó en las redes sociales, provocando una indignación generalizada entre la comunidad. Los comentarios reflejan la frustración de la población ante lo que parece ser una priorización de intereses económicos sobre la atención médica de calidad.
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“Qué gran sistema de salud tenemos, vean cómo se pelean por los clientes”, “Todo por el Soat”, “Que negocio tan bravo”, son algunos de los comentarios que se leen en la publicación.
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