Ofrecen recompensa de hasta $50 millones para dar con agresores de policías en centro de Bogotá

Tras una reunión extraordinaria de seguridad, la Policía y la Alcaldía de Bogotá ofrecieron una recompensa de hasta $50 millones para quien ayude a capturar a los responsables de agresiones y daños a uniformados, civiles y establecimientos, en medio de los desmanes de este miércoles en el centro de Bogotá.

Según el reporte de las autoridades, la situación deja, por ahora, 25 lesionados, entre ellos 15 policías y gestores de convivencia.

Foto: Policía

El secretario de Seguridad, Aníbal Fernández de Soto, calificó lo ocurrido como un hecho inaceptable y contó que hay dos personas capturadas. Además, respaldó el actuar de la fuerza pública.

“Desde la administración de Bogotá apoyamos y respaldamos la actuación que hoy adelantó la Policía, que se dio en el marco de estos protocolos. La violencia inició por cuenta de los manifestantes que estaban en el parque Santander, la actuación de la Policía lo que buscaba era defender el derecho a la libre movilidad de los ciudadanos, en especial los que estaban trabajando en el edificio Avianca”, aseveró el secretario.

Según Fernández, la reacción por parte de los indígenas y otros manifestantes fue de violencia, agresión e incluso sevicia.

“Pedimos a los ciudadanos afectados que nos compartan información y denuncien. Nosotros desde la administración también adelantamos los procesos legales correspondientes”, agregó Fernández.

Por su parte, el coronel Herbert Benavides, comandante encargado de la Policía de Bogotá, denunció la serie de delitos que se vieron en medio de las alteraciones.

“Violencia contra servidor público, lesiones personales, obstrucción a la vía y a la función pública, inclusive y lo más grave la instrumentalización de niños, niñas y adolescentes. Allí mujeres que inclusive estaban en gestación, hasta con niños en brazos, con una violencia exagerada en contra de los uniformados”, contó Benavides.

Tanto la Policía como la Alcaldía fueron enfáticos en respaldar el proceder de la fuerza pública, pues, antes de la llegada del Esmad, habían agotado las opciones de diálogo. También cuestionaron el comportamiento de los indígenas, pues aseguran que han invertido más de $9.000 millones en los últimos años para atender la comunidad.