El fiscal Francisco Barbosa reveló en Meridiano Blu, con Ricardo Ospina, que este juves, 19 de enero, se reunirá con la alcaldesa de Bogotá, Claudia López, para tratar la denuncia de supuestas desapariciones en los hornos crematorios de los cementerios de la capital en el marco del paro nacional del 2021. Esto, luego de la polémica que causó las afirmaciones dadas por el empresario Sergio Vanegas, que presuntamente 300 jóvenes fueron desaparecidos en los crematorios hace dos años.
"No hubo desaparecidos en Bogotá. Eso es una barbaridad. Esta persona tendrá que ir a la Fiscalía General de la Nación para demostrar eso o de lo contrario tendrá consecuencias penales", dijo el fiscal en Blu Radio.
Vale recordar que la Alcaldía de Bogotá denunció al empresario por calumnia, pues desde la administración local afirman que no hubo ni un solo desaparecido en las manifestaciones en la capital. Incluso se rechazó tajantemente "inventarse un holocausto y una atrocidad como esta no le va a impedir responderle a la justicia".
Ahora, la Fiscalía iniciará la respectiva investigación contra el empresario Vanegas para determinar los elementos probatorios que tiene para haber realizado dicha afirmación. De hecho, Barbosa recordó que en el paro nacional se llegaron a reportar más de 600 desapariciones, pero luego, una a una, se descartaron por parte de la misma comunidad.
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"El 28 de abril (de 2021) se iniciaron las protestas, 10 días después me llamó el defensor del Pueblo a decirme que había 548 reportes de desaparecidos en Colombia; aparecieron dos ONG, presentaron 548 y días después subió a 627. Es irrisible lo que ocurrió en Colombia. El 5 de mayo convocamos una mesa técnica para empezar el mecanismo de búsqueda urgente con 35 fiscales, Policía Judicial, Registraduría, URI, hospitales y hasta pusimos avisos en periódicos para buscar la gente, ¿y qué ocurrió? Aparecieron todos, no hubo ningún desaparecido", detalló el fiscal.
Barbosa calificó de irresponsable los reportes de las supuestas personas desaparecidas, pues no daban ningún detalle adicional, como la cédula. Incluso llegaban a la Fiscalía a preguntar por qué las fotos aparecían en los periódicos si esas personas estaban en sus hogares.
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"Es decir, se utilizó políticamente este instrumento para tratar de reventar a las instituciones. Días después llegamos ala reunión con la CIDH y terminó la farsa demostrándose gracias a lo que dice la Defensoría y Fiscalía", concluyó.