Toda una polémica se generó en redes sociales por un mural pintado sobre una de las columnas debajo de los puentes de las Américas con carrera 50, en Bogotá, pues fue hecho en el marco de una convocatoria del Museo Abierto de Idartes en apoyo con la comunidad y colectivos artísticos.
El mural retrata a un policía recibiendo una condecoración, rodeado de calaveras mientras en otra parte de la columna este mismo golpea a una persona; la pintura fue tapada con color blanco, acción que rechazó Catalina Valencia, directora de Idartes, quien dijo que “aquí no se puede borrar al que opina distinto o censurar el arte”.
Las convocatorias de murales urbanos son públicas. Cuando se habla de dineros públicos es porque son convocatorias públicas que existen en el sector cultura, recreación y deporte (…) Es un sistema que ha funcionado muy bien porque no interviene la institucionalidad; el Estado no puede ejercer censura en los proyector culturales
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Sobre la polémica, recalcó que como ente público nunca pueden intervenir “en la creación del artista y tampoco en la decisión de la comunidad de ser pintado” y que querían hacer algo diferente.
“Lo que duele en un país genera polémicas, pero esa es la oportunidad que tiene la democracia”, concluyó.
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Escuche la entrevista completa en Mañanas BLU:
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