Este miércoles se reveló una dura historia en Noticias Caracol sobre una mujer en Medellín a la que el ICBF le quitó cuatro de sus cinco hijos porque no tenía una vivienda digna ni las condiciones necesarias para sostener a los menores. La comunidad se unió para comprarle un lote y ahora realizan diferentes actividades para poder construir una casa.
“Era un ranchito de madera, no tiene baño ni los servicios adecuados, no hay ducha. Solo podemos dormir y ya”, dijo Yuri Tatiana Hernández, la mamá de los menores.
Por su parte, Carlos Andrés Botero, director regional del ICBF, afirmó que: “Esta medida queda sometida al seguimiento por parte de un equipo psicosocial, en el cual, después de superadas algunas fases del proceso, se puede retornar al menor de edad a su entorno familiar, evitando procesos de adopción”.
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Ante esta difícil situación, Luz Mery Bonilla, miembro de la comunidad del barrio donde vive Yuri, lideró una campaña para que con la unión de todos pudieran comprarle un lote a esta mujer, por intermedio de rifas y otras actividades consiguieron el anhelado terreno y ahora buscan fondos para poder construir una casa.
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Cabe aclarar que en este caso el papel del ICBF está en garantizar los derechos y el bienestar de los menores de edad para que tengan un desarrollo óptimo y unas condiciones de vida dignas.
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