Nuevamente la Procuraduría General de la Nación puso sus ojos sobre el Distrito de Medellín, en esta ocasión por el presunto detrimento patrimonial de 73 millones de pesos que se habría dado en una campaña publicitaria que contenía un mensaje engañoso del alcalde Daniel Quintero.
Los investigados son los funcionarios que desarrollaron la estrategia que consistió en la instalación de cientos de pasacalles en la ciudad, con una información que no sería verídica.
Según el ente de control, al parecer, “se instalaron 250 pasacalles entre el 25 de febrero y el 10 de marzo del presente año con la siguiente frase: “Es un hecho: el alcalde Daniel Quintero congelará la tarifa de servicios públicos”; algo que no ocurrió.
Luego de la investigación se establecerá si lo que hicieron los funcionarios constituye una falta disciplinaria.
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