Después de un represamiento de más de 22.000 migrantes, autoridades en Necoclí anunciaron que se ha superado la emergencia, pues la concentración bajó a 400 extranjeros en las playas de ese municipio de Urabá a la espera de su paso hacia la frontera con Panamá.
Según la Gerencia de Fronteras, esta reducción se debe al flujo de salida de los migrantes que estaban represados, 500 diarios, pero también a la menor llegada de los extranjeros desde el sur del continente ante las medidas restrictivas para el ingreso a Estados Unidos.
Este panorama es mucho más alentador para Necoclí que tuvo una crisis migratoria que colapsó los servicios del hospital local, los servicios públicos y hasta la economía.
De hecho, en un 98% disminuyó este represamiento de cubanos, haitianos, africanos y hasta latinos que buscan pasar a la frontera con Panamá para continuar el sueño americano.
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El gerente de Fronteras, Lucas Gómez, sostuvo que "la emergencia humanitaria que tuvimos en las semanas pasadas, incluso los meses pasados, pues ya no es una realidad"
"Hoy tenemos alrededor de unos 400 migrantes que cambian considerablemente frente a los 22.000 que llegamos a tener aquí en el municipio" , precisó Gómez.
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Las autoridades migratorias y nacionales plantearán acciones para evitar nuevas contingencias por el exceso de migración en el Urabá antioqueño.
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