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El ADN de los desaparecidos: historias que buscan verdad en fosas de falsos positivos

En este municipio, entrada al Urabá antioqueño, el propósito de un humilde hombre es encontrar a su hermano Rubén Darío, quien, según relatos, habría sido asesinado en una vereda llamada El Jordán, cuando tenía 24 años de edad.

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Foto de desaparecido en Dabeiba - Foto suministrada

El señor José de los Santos Batista llegó hasta Dabeiba, Antioquia, donde por estos días laJEP toma muestras de ADN para establecer si es posible cotejarlas con restos que han sido hallados en fosas comunes y en los que se presume hay víctimas de falsos positivos y desaparición forzada.

En este municipio, entrada al Urabá antioqueño, su propósito es encontrar a su hermano Rubén Darío, quien, según relatos, habría sido asesinado en una vereda llamada El Jordán, cuando tenía 24 años de edad. Dice José de los Santos que la razón de hallar el paradero de su hermano es conocer si dejó herederos, al menos, un sobrino que pueda sumarse a la familia.

Tengo unos pesos que me entregaron de indemnización por mi hermano y no los toco, quisiera que algún día me digan que dejó un hijo para que sea él quien disponga
expresó.

Hace pocos días, recibió una llamada en la que le dijeron que indagarían sobre su hermano, con la toma de una muestra de sangre. Al llegar a Dabeiba, encontró a una señora, quien le dijo que vivía en dicha vereda en zona rural. Le mostró la única fotografía que quedó: una en la que se encuentra uniformado con su equipo de fútbol.

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En dicha foto, aparecen varios hombres, uno de ellos fue reconocido por la mujer, con quien conversó, le relató que conocía a uno de la fotografía. Guarda la esperanza de que ella sea un puente para localizar a su hermano.

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De los Santos llegó desde Necoclí, Antioquia, y relató que su hermano trabajaba en una finca cafetera entre 1997 y 1998, desde donde nunca se supo más de él, en un lugar donde junto a él, se llevaron a otros hombres de condiciones similares.

Llamábamos, lo buscábamos, no contestaba; hasta que un día una muchacha nos dijo que a él lo habían matado, pero nunca se encontró el cadáver de él con varias personas, más o menos unas cuatro o cinco personas que se llevaron
contó.

Dice que tras varias denuncias, las respuestas han sido pocas, pero que no se atreve a decir o a especular si fue la guerrilla, los paramilitares o qué otro grupo armado, pues para esa época, eran varios los brazos subversivos los que hacían presencia en el Urabá y en el corredor de Antioquia hacia el Chocó y al norte en Córdoba.

“Algunas indagaciones pretenden señalar a las autodefensas, pero yo no me atrevo a decir porque no sé el caso”, aseguró.

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Aunque es probable, según sus palabras, que algún grupo ilegal esté detrás del homicidio, señala que no puede decir que el Ejército, por ejemplo, pueda estar detrás, pues asegura que al menos en esa época, no supo nunca de acciones en los que esa institución pudiera estar con las autodefensas.

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