El doctor Jorge Murcia, de la Clínica Navarra de Bogotá, manifestó que al ingreso al centro asistencial Rafael Uribe Noguera, supuesto asesino de la niña Yuliana Samboní, confesó haber consumido “perico”.
Esto explica, según el médico, la transcripción literal que aparece en la historia clínica del hombre que fue enviado a La Modelo por el asesinato de la menor de 7 años.
“La primera parte, que es el motivo de consulta, en este ítem se expresa lo que dice el paciente. Es normal que se exprese en palabras coloquiales”, dijo.
Agregó que en los demás ítems de la historia se usan términos técnicos.
En ese sentido, Murcia agregó que los exámenes médicos determinaron que Uribe Noguera consumió cocaína y opiáceos.
“Dentro de los estudios positivos indicaban que había consumido cocaína y opiáceos”, puntualizó.
El especialista explicó que el arquitecto de 38 años llegó de urgencia a la clínica en una ambulancia, aunque no especificó si llegó acompañado por la Policía.
“En principio, el paciente en la Clínica Monserrat se quejó de un dolor torácico y dada su especialidad consideraron que se trataba algún tipo de patología del corazón”, dijo al afirmar que los exámenes determinaron que Uribe sí tenía una isquemia cardiaca, originada por el consumo excesivo de drogas.
Murcia explicó que se enteró de lo que sucedía con Uribe Noguera por los medios de comunicación y que solo después hubo una notificación oficial sobre las ordenes de captura.
“Cuando se hace una custodia oficial fue a la 1:00 de la madrugada del martes. Inicialmente fue la familia del paciente la que solicitó apoyo de la Policía”, dijo.
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