En el Catatumbo, el reconocido líder social José del Carmen Abril, conocido como ‘Carmito’, fue rescatado por el Ejército Nacional tras denunciar que su vida estaba en peligro por el grupo guerrillero ELN. Una prueba más de la complicada situación de violencia en esta región del nororiente colombiano.El pasado jueves 16 de enero, ‘Carmito’ publicó un video en el que manifestó que miembros del ELN habían intentado buscarlo en su casa cuatro veces ese mismo día con intención de asesinarlo. Explicó que se encontraba refugiado en una loma, preocupado por su seguridad, mientras el conflicto armado entre el ELN y disidencias de las FARC escalaba en la zona.“Van muchas personas afectadas, están entrando a las casas y sacando a niños y mujeres. Hoy temo por mi vida”, dijo Abril, quien también pidió ayuda a la comunidad internacional y a las autoridades nacionales para intervenir en la situación. Además, cuestionó a los líderes del ELN, pidiéndoles reflexionar sobre sus acciones.>>> Lea también: Las razones detrás de la escalada violenta entre el ELN y disidencias en CatatumboEjército rescató a líder social en el CatatumboEl viernes 17 de enero, ‘Carmito’ anunció en un nuevo video, y con notable emoción, que había sido rescatado por el Ejército Nacional. Agradeció el esfuerzo realizado por las personas que lo ayudaron y explicó que había estado en manos del ELN, quienes planeaban quitarle la vida.El rescate ocurrió en medio de una escalada de violencia en el Catatumbo, donde los enfrentamientos entre el ELN y disidencias de las FARC han afectado gravemente a la población civil, según informó la Defensoría del Pueblo.El presidente Gustavo Petro, en respuesta a los hechos en esta región, anunció la suspensión de los diálogos de paz con el ELN. “Lo que ha ocurrido en el Catatumbo son crímenes graves. Se suspende el proceso de diálogo con este grupo”, afirmó el mandatario.Esta decisión fue respaldada por Vera Grabe, jefa de la delegación del Gobierno en los diálogos, quien explicó que los obstáculos del ELN para avanzar en la paz llevaron a esta determinación.
Durante la tercera fase de intervención al Cementerio Campo Hermoso de Bucaramanga, la Unidad de Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas, encontró restos óseos pertenecientes a menores buscados por las familias quienes aseguraron que fueron reclutados de manera ilegal por las extintas Farc.En tumbas del cementerio fueron encontrados 8 cuerpos de niños, niñas y adolescentes desaparecidos durante los años 2000 y 2001 en el páramo de Berlín, el análisis forense realizado a los restos óseos confirmó que la mayoría de las víctimas eran menores.Sin embargo, no fue posible establecer su identidad, debido a la ausencia de documentos con huellas dactilares, lo que impidió su plena identificación, por lo que la Unidad hace un llamado a Familiares victimas del conflicto armado en Berlín ha acercarse a Medicina Legal para su identificación.Manuel Guillermo Criales Aponte, coordinador de la Unidad de Búsqueda en Santander, explicó que, "los cuerpos ya habían sido sometidos a una primera necropsia por parte del Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses, donde las investigaciones arrojaron que algunos son menores y otros adultos identificados".Hasta la fecha, la investigación de la Unidad de Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas, ha logrado encontrar los restos de al menos 62 personas desaparecidas en el marco de la operación Berlín. Estos cuerpos fueron sepultados en el cementerio municipal de Bucaramanga entre finales de 2000 y principios de 2001. La intervención en el cementerio se enmarca dentro del Plan Regional de Búsqueda para el Área Metropolitana - Soto Norte, un proceso de investigación que ha permitido la exhumación de 52 cuerpos a lo largo de sus tres fases. Estos restos han sido remitidos al Instituto de Medicina Legal, donde se están llevando a cabo las acciones necesarias para avanzar en su identificación.La Unidad continúa avanzando en la búsqueda de respuestas para las víctimas y sus familias, con el objetivo de esclarecer los hechos y contribuir a la reparación integral de las personas afectadas.
En intervención quirúrgica se encuentran dos de los cuatro policías que fueron remitidos al Hospital Universitario de Santander debido a la gravedad de sus heridas, luego de ser estabilizados en Aguachica, Cesar, uno de los uniformados trasladados registra una herida de gravedad que compromete un brazo por lo que le será amputado.Otro de los policías registra atención quirúrgica por esquirlas que comprometieron partes de su cuerpo, por lo que fueron atendidos de urgencias con especialistas en el centro médico.Los otros dos uniformados, de 33 y 28 años, se encuentran en condiciones más estables, sin embargo también serán evaluados por especialistas, ya que registran heridas que no comprometen ningún órgano, por lo que se espera que reciban un tratamiento médico que puede ser más ambulatorio. Los hechos ocurrieron en la noche del jueves 16 de enero, cuando un ataque con artefacto explosivo en la vereda Los Pinos, zona rural del municipio de Pelaya, Cesar, dejó siete policías heridos. Los uniformados, integrantes del Grupo de Operaciones Especiales (GOES) de Hidrocarburos de la Policía, se encontraban realizando labores de vigilancia en una infraestructura petrolera de la región cuando fueron sorprendidos por la explosión.De los siete policías que resultaron heridos en medio del ataque explosivo, cuatro de ellos fueron remitidos a Bucaramanga a un Hospital de mayor nivel.
Autoridades confirmaron este viernes 17 de enero en Cúcuta, Norte de Santander, el hallazgo del cuerpo sin vida del policía Jesús David Tarazona Martínez, quien había desaparecido el pasado 2 de enero después de haber cruzado el puente internacional Francisco de Paula Santander.El cuerpo fue encontrado con impactos de arma de fuego en una zona boscosa, exactamente, en una trocha conocida como El Águila, ubicada cerca del barrio El Escobal. Sobre Jesús David Tarazona se conoció que tenía sólo 19 años y se desempeñaba como auxiliar de policía.Sobre su desapariciónYeferson Tarazona dijo en Blu Radio que desde el 2 de enero este joven se desplazó hasta Ureña en búsqueda de una moto que habían dejado parqueada en esa zona.“Él se fue el 2 de enero a Ureña a buscar una moto, según nos dijo su novia. Ellos se comunicaban por llamada, y él le dijo que iba para allá, pero después no hubo más comunicación” aseguró el hermano de la víctima.
El secretario del Interior y gobernador encargado de Santander, Oscar Hernández, alertó sobre la creciente violencia en el Magdalena Medio y Barrancabermeja, que, según él, es el resultado de una alianza entre el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y la banda criminal “La Unión”, al igual que otros actores criminales.Esta asociación, según Hernández, está generando una ola de inseguridad en el puerto petrolero, especialmente por el control del tráfico de estupefacientes y las disputas territoriales.“Nos preocupa el nivel de violencia y la alianza que tienen grupos armados organizados, en este caso el ELN con grupos de delincuencia común organizada, que prestan actividades ilícitas al tráfico local de estupefacientes, generando disputas de territorio y procesos de autoeliminación”, afirmó Hernández.El secretario destacó que esta colaboración entre el ELN y las bandas criminales se ha evidenciado en actos violentos, como el reciente sicariato registrado en Barrancabermeja, donde se encontraron armas largas en el lugar de los hechos. “Justo el pasado jueves, el ELN, a través de su red de apoyo al terrorismo, se alió con grupos de delincuencia organizada para atentar contra dos ciudadanos, probablemente por la disputa del tráfico local de estupefacientes”, señaló Hernández.De acuerdo con el funcionario detrás de estos grupos, hay una estructura de finanzas ilícitas que articula el delito, lo que también impacta en otros delitos como la extorsión.Oscar Hernández destacó que, debido a la magnitud del problema, la Gobernación de Santander está trabajando en coordinación con el Gobierno Nacional para aumentar las capacidades investigativas y judiciales en la región. En particular, hizo énfasis en la necesidad de fortalecer las investigaciones sobre el tráfico de estupefacientes y los crímenes asociados a esta actividad ilegal.“Es fundamental el fortalecimiento de la investigación judicial, ya que esto nos permitirá esclarecer los hechos y poner a disposición de la justicia a los actores armados que están sembrando el caos en el territorio”, afirmó el gobernador encargado.Finalmente, Hernández expresó su preocupación por el hecho de que el 92% de los homicidios en Barrancabermeja están relacionados con disputas entre grupos de delincuencia organizada, lo que genera un ambiente de inseguridad constante. Sin embargo, destacó que la Gobernación de Santander continuará trabajando para contrarrestar estos hechos de violencia a través de la acción unificada entre las autoridades locales y nacionales.
Lo que fue un millonario fleteo de $208 millones a un comerciante en el barrio La Concordia de Bucaramanga, ocurrido el pasado 7 de enero de 2025, con el avance de la investigación empezó a generar dudas entre las autoridades que se cuestionan sobre las circunstancias y los autores de este hecho delincuencial. Según reveló el alcalde de Bucaramanga, Jaime Andrés Beltrán, el robo tiene elementos que van más allá de un hecho delincuencial.“La investigación avanza, tenemos identificados y hay noticias que se estarán dando en los próximos días. La investigación ha tomado un giro inesperado y eso hace que esto vaya más allá de un hecho delincuencia y cambia completamente el componente”, señaló el mandatario.Aunque el alcalde Beltrán no entregó mayores detalles sobre la historia alrededor del robo, dijo que las autoridades trabajan en varias hipótesis.“Les pido paciencia para que la Fiscalía y la Policía en el proceso de investigación nos puedan acelerar los resultados, pero lo que puedo decir es que esto se está alejando cada vez más de un hecho delincuencial y nos lleva a otras hipótesis que están siendo confirmadas en los próximos días”, manifestó Beltrán.Según informaron en su momento las autoridades, el atraco ocurrió en la calle 48 con carrera 22. La víctima había retirado $408 millones de una entidad bancaria ubicada en el barrio Sotomayor y desde allí fue seguida por los delincuentes que iban vestidos con prendas de la empresa de Aseo de Bucaramanga, posteriormente, lo interceptan cuando llegó a su destino, un negocio de publicidad ubicado en la zona.Decía el reporte oficial que los ladrones golpearon con un arma a la víctima y se llevaron uno de los dos bolsos con un poco más de la mitad del dinero que había retirado, es decir, $208 millones.Tras apoderarse del botín, los ladrones huyeron a toda velocidad, logrando escapar del lugar.Por este millonario robo no ha sido capturada ninguna persona y se esperan los resultados de la investigación.
El departamento de Santander oficializó el calendario tributario correspondiente al impuesto sobre vehículos automotores para el período gravable 2025. De acuerdo con la Gobernación, los contribuyentes podrán cumplir con esta obligación desde el 1 de enero hasta las fechas límite fijadas según el último dígito de la placa del vehículo.El cronograma establece los siguientes plazos para el pago del impuesto sin sanciones ni intereses:Placas terminadas en 1 y 2: hasta el 9 de mayo de 2025.Placas terminadas en 3 y 4: hasta el 16 de mayo de 2025.Placas terminadas en 5, 6 y 7: hasta el 23 de mayo de 2025.Placas terminadas en 8, 9 y 0: hasta el 30 de mayo de 2025.Este calendario aplica para todos los vehículos y motocicletas matriculados en las direcciones, organismos o secretarías de tránsito de los municipios de Santander.Las autoridades recordaron que, una vez vencido el plazo correspondiente según el número de placa, se aplicarán sanciones e intereses moratorios, tal como lo establece el Estatuto Tributario Nacional y el departamental. La sanción mínima para quienes incumplan con el pago será de 249.000 pesos.Para facilitar el cumplimiento de esta obligación, la Gobernación habilitó múltiples canales de pago. Los contribuyentes pueden consultar y realizar el pago en línea ingresando al portal oficial: https://edeskprisma.syc.com.co/SANTANDER.Quienes prefieran realizar el pago de manera presencial pueden acercarse a las sedes de La Casa del Libro Total en Bucaramanga: calle 35 # 9-81, Barrancabermeja: carrera 8B # 50-28 y San Gil: Centro Comercial El Puente, carrera 12 # 12-192, local 178.Adicionalmente, el pago también puede efectuarse en las siguientes entidades bancarias: Bancolombia, Banco Popular, Occidente, Davivienda, BBVA, AV Villas y Banco Agrario de Colombia.Las autoridades invitaron a los contribuyentes a cumplir con esta obligación dentro de los plazos establecidos, recordando la importancia del pago puntual para evitar sanciones y contribuir al fortalecimiento de los recursos del departamento.
La reciente decisión del presidente Gustavo Petro de suspender los diálogos con el ELN, tras los asesinatos de firmantes de paz en el Catatumbo y el ataque a la Fuerza Pública en el departamento del Cesar, ha generado reacciones de organizaciones sociales y de derechos humanos. Eduardo Ramírez, de la ONG Compromiso, se pronunció sobre estos hechos que, según él, afectan directamente los avances hacia la paz total en Colombia.Ramírez calificó como muy lamentables las acciones del ELN en el Catatumbo, las cuales, según explicó, representan un ataque directo al proceso de paz impulsado por el Gobierno Nacional. "Lo que ocurre en el Catatumbo es un ataque directo a esa propuesta de paz. Cinco firmantes del acuerdo de paz de 2016 fueron asesinados en diferentes puntos de esa zona, lo que pone en evidencia la gravedad de la situación", afirmó Ramírez.El dirigente de la ONG también expresó que, ante estos ataques, el presidente Petro no tenía otra alternativa que suspender los diálogos con el grupo armado. "No le queda otra salida al presidente, desde el análisis que hacemos nosotros, que tomar una decisión firme frente a lo que es un diálogo que debe conducir hacia esa paz total que se anhela en Colombia", señaló.Ramírez subrayó que la situación en la región sigue siendo extremadamente compleja. En el Catatumbo y el Magdalena Medio, las autoridades enfrentan no solo a las disidencias de las FARC, sino también a grupos armados de ultraderecha que continúan afectando a la población civil. "Estos grupos están cometiendo crímenes contra líderes sociales, excombatientes y firmantes de paz, lo cual genera un clima de violencia que impacta a la población que ya no está en guerra", indicó Ramírez.La ONG Compromiso hizo un llamado a las autoridades y a las organizaciones sociales para que se garantice la seguridad y el control de las acciones armadas en la región."Hacemos un llamado a que haya un nivel de tranquilidad y control, porque lo que está en juego es la vida de las personas que ya no están en conflicto y que están comprometidas con la paz", manifestó.Finalmente, Ramírez destacó que la presencia de grupos armados en el Magdalena Medio y Barrancabermeja no es un fenómeno reciente. Aunque en el pasado se negaba la existencia de estos grupos, hoy es evidente que tanto el ELN como otras facciones armadas, de izquierda y derecha, siguen operando en estas zonas, generando un entorno de inseguridad para la población civil."Es evidente que hay presencia de grupos de derecha y otras tendencias, y eso afecta gravemente a la población civil", concluyó.
Los enfrentamientos en la región del Catatumbo, entre la guerrilla del ELN y una disidencia de las Farc dejan ya más de 30 muertos, entre ellos cinco firmantes del acuerdo de paz, según informó este viernes la defensora del Pueblo, Iris Marín."Lo que se está presentando en el Catatumbo es de extrema gravedad", dijo Marín en su cuenta de X, donde añadió que "se reportan más de 30 personas muertas según información en confirmación, al menos 5 firmantes de paz asesinados, 10 heridos".Marín añadió que hay "secuestros, niños sin acompañamiento o personas con discapacidades fuertes sin poder huir, desplazamientos forzados, confinamientos, inclusive de profesores que se alistaban para el inicio de clases", crímenes que el presidente Gustavo Petro, ha considerado "de guerra" y por los que anunció la suspensión de diálogos con el ELN.En entrevista con Mañanas Blu, la defensora del Pueblo manifestó que la respuesta del Gobierno nacional no tomó las medidas necesarias para detener los enfrentamientos, tales como presencia militar, pero también de ayuda humanitaria.“Eso es lo que se debe priorizar, solicitar al ELN que respete a la población civil pues deben tener algo de coherencia con los ideales que dicen defender”, manifestó.En imágenes divulgadas ayer en redes sociales por habitantes de la zona se ve cómo en algunos caseríos la gente busca protección en sus casas para escapar del fuego cruzado entre el ELN y el Estado Mayor Central (EMC), una de las disidencias de las Farc, que comenzó a media mañana del jueves.El jefe guerrillero Andrey Avendaño, que fue negociador de paz del EMC con el Gobierno, y que se presenta como comandante del Frente 33 de las disidencias de las Farc, aseguró ayer en un mensaje de audio, cuya autenticidad no han confirmado las autoridades: "el ELN ha tomado la decisión de atacar a todas nuestras unidades", "han matado civiles, gente desarmada".Ante esa situación, la funcionaria hizo "un llamado al ELN para que respete el Derecho Internacional Humanitario (DIH) y cese de inmediato los ataques contra la población", al tiempo que pidió "priorizar acciones humanitarias para proteger a la población".Marín recordó que la Defensoría del Pueblo "había alertado varias veces y había emitido una alerta de inminencia en noviembre" sobre el peligro de una guerra entre guerrillas en el Catatumbo y concluyó: "Hoy tendremos que reportar su consumación".La zona del Catatumbo, en el departamento de Norte de Santander, es una región pobre y montañosa que limita con Venezuela y está formada por los municipios de Ábrego, Convención, El Carmen, El Tarra, Hacarí, La Playa, San Calixto, Sardinata, Teorama y Tibú.En ellos operan el ELN, disidencias de las Farc, un reducto del Ejército Popular de Liberación (EPL) y otras bandas que se disputan el control de los cultivos de coca y de los corredores para el narcotráfico.A Tibú se trasladará hoy el presidente Petro "para evaluar la situación de orden público del Catatumbo".
Rafael Dudamel, el técnico venezolano que llevó al Atlético Bucaramanga a conseguir su primera estrella en el Fútbol Profesional Colombiano fue galardonado durante la Gala Estrellas Águila, que premió a los mejores de la temporada 2024.El trabajo y la entrega del estratega fueron clave para alcanzar los objetivos planteados y por eso Dudamel levantó el trofeo a mejor director técnico del año."Nosotros nos preparamos permanentemente y al final somos unos facilitadores para nuestros atletas, para nuestros jugadores, para que salgan a la cancha con una idea, pero son ellos los que marcan la diferencia", dijo el técnico al recibir la estatuilla.El 'profe' Dudamel fue más allá y siguió destacando la labor de sus pupilos: "Está acá Jefferson Mena, capitán de Atlético Bucaramanga, campeón después de 75 años. Quiero, Jefferson, darte las gracias capitán, y que por favor se lo extiendas a todos tus compañeros, a todos los jugadores, a todo el plantel. Un fuerte abrazo a la dirigencia y mucho éxito al profesor Florentín en este nuevo proceso".En medio de la gala de premiación, el técnico no olvidó la región donde alcanzó esta gesta y mucho menos el apoyo que recibió por parte de la hincha: "Estará la región de Santander clavada en mi corazón por siempre, porque nosotros lo hicimos en la cancha y ellos en la tribuna. Ese aliento que siempre nos sacó lo mejor, fue vital para poder alcanzar este maravilloso logro. Y recordaré siempre el 2024 de una manera muy especial".En Santander el 2024 no solo será recordado como el año del campeonato, sino como un ejemplo de que los sueños, aunque tarden décadas, siempre pueden cumplirse con trabajo, unidad y pasión. El 'Leopardo' fue campeón después de 75 años y en Bucaramanga aún se respira el triunfo.
La Defensoría del Pueblo había emitido al menos dos alertas tempranas en los últimos meses sobre la posibilidad de que el conflicto entre disidencias del frente 33 y ELN escalara en la región del Catatumbo, alerta que se cumplió este jueves 16 de enero.“Lo que se está presentando en el Catatumbo es de extrema gravedad. La Defensoría había alertado varias veces y había emitido una alerta de inminencia en noviembre. Hoy tendremos que reportar su consumación”, dijo la defensora Iris Marín.Dichas alertas son la Temprana 025 de 2021 y la alerta de Inminencia 026 de noviembre de 2024, que ya incluían recomendaciones a las autoridades locales para la protección de la población civil.Hasta el momento, han sido ubicados los cuerpos de cinco firmantes de paz asesinados, pero avanzan en la verificación de otros 23 a 25 asesinatos que la comunidad ha reportado desde los territorios.La otra preocupación es precisamente el confinamiento de los habitantes de municipios como El Tarra, Hacarí, Convención y Tibú, donde la gente se encerró en sus viviendas, el comercio cerró y las clases se suspendieron.Y es que en videos grabados por los ciudadanos, se ve a hombres armados buscando a quienes serían firmantes casa por casa para luego llevárselos secuestrados y asesinarlos.“Se hace un llamado al ELN para que respete el DIH y cese de inmediato los ataques contra la población. También se deben priorizar acciones humanitarias para proteger a la población”, pidió la defensora.En la tarde de este viernes, 17 de enero, se espera la llegada del presidente Gustavo Petro a Tibú, uno de los municipios más afectados por los hechos violentos; allí liderará una reunión de seguridad.
La región del Catatumbo, en Norte de Santander, atraviesa una nueva ola de violencia que ha dejado decenas de muertos, desplazados y una comunidad sumida en el dolor. En una entrevista con Mañanas Blu, Carmen García, presidenta de la Asociación de Madres del Catatumbo por la Paz, hizo un llamado urgente al diálogo y denunció las condiciones que han llevado a los jóvenes de la región a empuñar armas, enfrentándose incluso entre familiares y conocidos.El clamor de las madres ante una guerra que no cesaCarmen García, visiblemente afectada, expresó la angustia de las madres de la región, quienes ven a sus hijos siendo arrastrados por el conflicto. “Son nuestros hijos en el territorio. Es el pueblo el que se está matando en este momento”, afirmó durante la entrevista, refiriéndose a los enfrentamientos entre el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y las disidencias del Estado Mayor Central (EMC), antiguas FARC.La presidenta de la asociación explicó que, detrás de los criminales que hoy protagonizan esta guerra, hay jóvenes que no tuvieron oportunidades educativas ni económicas. “Muchos de esos jóvenes que están allí alzados en armas son jóvenes que los paramilitares les mataron a sus papás, fueron jóvenes que no tuvieron una oportunidad de ir a una universidad y la única oportunidad que tuvieron fue empuñar un arma”, señaló, destacando la falta de alternativas en una región históricamente golpeada por el abandono estatal.García insistió en la importancia de renovar las mesas de diálogo para detener los enfrentamientos. “Lo único que tiene que pasar para que este enfrentamiento cese es apoyarnos todos. Esto es una guerra que nos ha dolido a todos y le duele a Colombia”, dijo con contundencia. Según la lideresa, el conflicto no solo afecta a los combatientes, sino también a civiles inocentes, como quedó demostrado con la muerte reciente de un bebé de apenas nueve meses.Un conflicto arraigado en la disputa por el territorioLos enfrentamientos entre el ELN y las disidencias del EMC tienen su origen en la lucha por el control de los cultivos de coca, el petróleo y las rutas estratégicas para el narcotráfico en el Catatumbo. Según García, esta escalada de violencia era previsible tras los acuerdos de paz firmados en 2016 con las antiguas FARC. “Nosotros veníamos advirtiéndole al Gobierno nacional, no solamente a este, sino al anterior también, que esto se venía viendo”, afirmó, recordando que esta situación no es nueva para la región.En los últimos días, más de 22 personas han sido asesinadas, 70 familias han sido desplazadas y un número indeterminado de habitantes ha resultado herido. Según informes de la Agencia para la Reincorporación y la Normalización (ARN), entre las víctimas recientes se encuentran al menos cuatro excombatientes de las FARC, firmantes del Acuerdo de Paz, quienes fueron ejecutados presuntamente por guerrilleros del ELN.Además, imágenes compartidas en redes sociales por habitantes del Catatumbo muestran enfrentamientos armados en las calles y denuncian que guerrilleros del ELN han sacado de sus casas a varias personas, cuya suerte aún se desconoce.El gobierno y la "paz total" en entredichoAnte la gravedad de los hechos, el presidente Gustavo Petro anunció su presencia en la región para liderar un consejo de seguridad. Sin embargo, este gesto ha sido recibido con escepticismo por líderes locales y activistas. “¿Cuántos consejos de seguridad hemos visto en Tibú, en Cauca, en Nariño? Está muy bien que el presidente vaya, pero esto no se soluciona solo con eso”, expresó Carmen García.La propuesta del Gobierno de avanzar hacia la "paz total", que incluye negociaciones con el ELN y otros grupos armados, ha enfrentado críticas debido a la falta de resultados concretos. A pesar de esto, García insiste en que el diálogo es la única salida posible. “Hay que dar un debate sobre la solución. O el Estado somete a estos criminales o los criminales van a terminar sometiendo a los colombianos”, dijo, llamando a un mayor compromiso estatal.El sufrimiento de una región olvidadaEl Catatumbo, conformado por municipios como Tibú, El Tarra y Teorama, es una de las regiones más pobres y violentas de Colombia. La presencia de diversos grupos armados, sumada a la pobreza estructural, ha convertido a esta zona en un escenario constante de conflicto.Las palabras de Carmen García resumen el dolor de las comunidades locales. “Somos las mamás de estos jóvenes que están en la guerra, somos las mamás de los policías y de los soldados. Aquí están muriendo jóvenes civiles que no tienen nada que ver. Esto nos duele como madres y como defensoras de derechos humanos”.“Las que estamos poniendo las lágrimas en nuestro territorio somos nosotras, las madres”, concluyó García, en un llamado al gobierno, los grupos armados y la sociedad en general para buscar soluciones que pongan fin al sufrimiento de una región que lleva décadas clamando por la pa
Todo un foco de violencia estalló entre el ELN y el Estado Mayor Central (EMC), una de las disidencias de las antiguas Farc, en la convulsa región del Catatumbo, donde ya se cobró la vida de varios firmantes del acuerdo de paz.En un principio, la Misión de la ONU en Colombia informó de cinco firmantes de paz asesinados, pero la Agencia para la Reincorporación y la Normalización (ARN) señaló que son cuatro los excombatientes que, al parecer, fueron "sacados de sus viviendas y ejecutados" por guerrilleros del ELN, sin embargo, en las últimas horas confirmaron que pueden ser más de 23 muertos. En diálogo con Mañanas Blu, el general Giovanni Rodríguez, comandante de la Segunda División del Ejército, entregó detalles de la situación en esta zona del país, aseguró que, de momento se habla de 7 personas asesinadas, sin embargo, están verificando si se trataría de 23 personas. "Nosotros tenemos a con el PMU que finalizamos ayer en la noche. 23 (muertos) que fueron determinados en diferentes áreas. Ese es el número que nos dicen a través de algunas personas que están en la región. 23 personas asesinadas. Al parecer, dentro de esos habían o estaban identificados cinco firmantes de paz", explicó. De acuerdo con el general, "el narcotráfico es el centro de gravedad de estas confrontaciones" y añadió que "los grupos armados están luchando por el control de esta economía ilícita, que afecta directamente a la población civil". El general también sugirió que un incidente aislado, como el asesinato de Miguel Ángel López y su familia, podría haber sido un detonante para el aumento de la violencia. Sin embargo, dejó claro que no puede establecer una conexión directa entre este evento y la escalada de confrontaciones. "Podría haber sido un hecho aislado o una retaliación dentro del contexto del narcotráfico", dijo. Además, recordó que han implementado esfuerzos operacionales y humanitarios para evacuar a heridos y personas en peligro. Con respecto al impacto en la comunidad, el general mencionó que hasta la fecha han contabilizado 23 asesinatos, entre ellos cinco firmantes de paz. Destacó la importancia de llevar a cabo evacuaciones médicas y aseguró que tienen la intención de mantener la paz en la zona mientras se trabaja en la protección de los civiles. "Garantizar la protección de la población civil es nuestra principal prioridad", subrayó. Hay que decir, que en las últimas hora, la Defensoría del Pueblo habló de al menos 30 personas asesinadas en medio de los combates en el Catatumbo. Escuche aquí la entrevista:
Un paseo familiar en Barrancabermeja terminó en tragedia la tarde de este jueves 16 de enero. Francisco Sarmiento, de 34 años, salió de paseo junto a sus familiares, quienes habían llegado desde Bogotá, y decidieron visitar la ciénaga San Silvestre.La tragedia comenzó cuando un menor, sobrino de Francisco, se encontraba en el agua, en el sector de La Represa, y comenzó a pedir auxilio porque se estaba ahogando. En ese momento, Francisco se lanzó al agua para rescatarlo y logró cumplir con su cometido, pero lamentablemente no logró salir de la ciénaga.Un hombre que se encontraba en la represa y observó los hechos se lanzó al agua en un intento por salvar a Francisco Sarmiento. Sin embargo, no logró rescatarlo, debido a la profundidad de las aguas. Tras este intento de rescate, el hombre fue trasladado a un centro asistencial, donde permanece recibiendo atención médica.Bomberos acudieron al lugar para iniciar la búsqueda de Francisco Sarmiento, quien era originario de Bogotá y trabajaba como guarda de seguridad para la empresa Impala.
A través de inteligencia y la interceptación de llamadas telefónicas, las autoridades de Bucaramanga lograron identificar y judicializar a tres hombres y una mujer que hacen parte de la banda del microtráfico liderada por alias 'Chorizo'. Es por eso que se realiza un operativo en Floridablanca, donde fueron capturados los cuatro sospechosos por el delito de tráfico de estupefacientes. “El accionar de este grupo delincuencial se concentraba en la entrega de las dosis a domicilio utilizando motocicletas o vehículos", dijo el coronel Savin Andrade, comandante (e) de la Policía Metropolitana de Bucaramanga. El alcalde de Bucaramanga, Jaime Andrés Beltrán Martínez, confirmó que un fiscal expidió una orden para recapturar a alias 'Chorizo', quien estaba a punto de recobrar la libertad. "También evitamos que Andrés Fabián Niño Soto, un peligro delincuente saliera de la cárcel de Combita, Boyacá, con detención domiciliaria. Un fiscal logró expedir un orden judicial contra alias 'Chorizo' para que responda por un nuevo delito", afirmó el mandatario. Durante el operativo donde fueron capturados cuatro "secuaces" de alias 'Chorizo', se incautó una pistola calibre 9 milímetro, 2.987 gramos de marihuana y cocaína, cinco teléfonos celulares, un vehículo y otros elementos que hacen parte de la investigación. Desde el 1 de enero las autoridades en Bucaramanga en diferentes operativos han capturado a más de 50 personas por el delito de tráfico de estupefacientes.
La situación migratoria en Colombia sigue siendo un desafío, especialmente en ciudades como Bucaramanga, donde la llegada de familias migrantes pone en riesgo los recursos locales."La ciudad, en su presupuesto, tiene aproximadamente casi un 12% destinado a diferentes temas de atención migratoria, como es salud, educación, oportunidades de formalización y articulación con entidades internacionales para la proyección laboral. Pero de manera puntual, hoy Bucaramanga puede contener lo que tiene, pero frente a una llegada masiva, no tiene las capacidades", advirtió Jaime Andrés Beltrán, alcalde de la capital santandereana.Actualmente, más de 5.300 estudiantes hijos de migrantes están siendo atendidos en las instituciones educativas de la ciudad. Sin embargo, las capacidades están al límite. “Si llegan 5.000 estudiantes más no tendremos cómo atenderlos. No es solo un tema de cupos escolares, también hablamos de alimentación, transporte y acompañamiento integral”, expresó el mandatario.Otro de los sectores críticos es el de salud públicaLa atención a personas migrantes, que llegan con necesidades urgentes, absorbe gran parte de los recursos disponibles. Esto se traduce en retrasos y limitaciones para atender tanto a los migrantes como a los ciudadanos locales, quienes comparten la presión de un sistema desbordado.En el ámbito laboral, la integración de la población migrante también se enfrenta a grandes obstáculos. A pesar de los esfuerzos por crear oportunidades y ofrecer acompañamiento, la formalización sigue siendo un proceso lento y complejo. Esto no solo afecta a los migrantes, sino también a la economía local, que necesita apoyo y estrategias claras para gestionar la incorporación de esta fuerza laboral.Aunque hoy Bucaramanga ha logrado contener la situación con los recursos disponibles, las autoridades locales temen un escenario de llegada masiva de migrantes. En este contexto, el apoyo internacional es más necesario que nunca. “Muchas organizaciones internacionales, que el año pasado cerraron sus convenios al considerar superada la crisis, deben retomar su apoyo. La realidad que enfrentamos no ha desaparecido; al contrario, se agrava”, acotó Jaime Andrés Beltrán.El mandatario de los bumangueses nuevamente le envió un duro mensaje al Gobierno nacional: "Que entienda que la realidad migratoria va más allá de un abrir o cerrar la frontera. Es un tema coyuntural que afecta a la economía de los municipios. Y ahí es donde yo reitero, es que a nosotros los alcaldes nos descentralizan los problemas, pero no los recursos. Nos hacen responsables de la atención a las familias migrantes frente a una política de apertura migratoria, pero no nos dan los elementos para poder atender las necesidades", concluyó.De acuerdo con los últimos reportes entregados por las autoridades, en Santander hay, por lo menos, 120.000 venezolanos.
Por más de 14 años, los habitantes del barrio Villa Luz, en Bucaramanga, convivieron con un problema que parecía no tener solución. La antigua escuela del sector, abandonada y deteriorada, se había convertido en un foco de inseguridad. Su estructura, completamente en ruinas, albergaba a consumidores de estupefacientes y delincuentes, generando miedo y desasosiego entre los residentes. Sin embargo, este panorama está a punto de cambiar.José Fernando Sánchez Carvajal, alcalde de Floridablanca, confirmó que esta semana inició la demolición de la estructura abandonada, dando paso a un proyecto que promete transformar la realidad del sector: la construcción de un parque público. Este espacio será un punto de encuentro para la comunidad y una oportunidad para devolverles la tranquilidad que por años les fue arrebatada.Genny Paola Hurtado, residente del sector, expresó su alivio y gratitud por esta intervención. “Es una bendición que piensen en nuestro barrio. Este lugar llevaba años descuidado, lleno de basura y peligro. Ahora, no solo tendrá un uso, sino que será un beneficio para nuestros hijos y para la comunidad en general”, comentó.El deterioro de la escuela no solo impactaba la estética del barrio, sino que también afectaba profundamente la convivencia. Los constantes robos y el tráfico de estupefacientes en el lugar generaban temor entre los vecinos, quienes durante años clamaron por una solución.El alcalde Sánchez Carvajal destacó la importancia de esta transformación para la ciudad y para el bienestar de las familias florideñas. “Desde el gobierno municipal asumimos el compromiso de cambiar este espacio que representaba un peligro para los ciudadanos. En pocos meses, las familias podrán disfrutar de un parque que fomentará la recreación, el deporte y la unión comunitaria”, aseguró.El proyecto del parque, ubicado en la Comuna Cuatro, es parte de un plan integral de modernización de espacios públicos en Floridablanca. Con esta iniciativa, la administración municipal busca no solo embellecer la ciudad, sino también fortalecer el tejido social y devolver la seguridad a los barrios más vulnerables.“Es un sueño hecho realidad. Ahora podemos imaginar a los niños jugando aquí, a las familias disfrutando de un espacio seguro y limpio. Este parque será el corazón del barrio”, concluyó Hurtado.
En los primeros 16 días del año el departamento de Santander ha registrado 27 homicidios, una cifra que pone en alerta a las autoridades y a la comunidad. Según Douglas Arenas, director de Seguridad y Convivencia Ciudadana de Santander, el dato más preocupante es que 15 de estos homicidios están relacionados con hechos de intolerancia, principalmente entre amigos y familiares, alimentados en su mayoría por el consumo de alcohol.“La intolerancia nos está matando. Es alarmante que discusiones triviales, miradas desafiantes o incidentes menores, como cerrar el paso en la vía, terminen en agresiones fatales. Estamos hablando de un promedio cercano a dos homicidios diarios en el departamento, y la gran mayoría de ellos son con arma blanca”, señaló Arenas.De los 15 homicidios por intolerancia, la mayoría ocurren durante la noche o la madrugada, en espacios donde las víctimas y los victimarios comparten momentos de ocio, frecuentemente marcados por el exceso de licor. “También estamos viendo un preocupante número de casos de violencia intrafamiliar, que se dan dentro de los hogares, donde la intervención policial es mucho más compleja”, explicó Arenas.Durante este corto periodo, la Policía ha incautado más de 1.800 armas blancas solo en el área metropolitana de Bucaramanga. “Es impresionante la cantidad de santandereanos que andan con un cuchillo en la cintura. Este fenómeno refleja una peligrosa cultura de resolución de conflictos mediante la violencia”, agregó el funcionario.De acuerdo con los municipios más impactados por los homicidios incluyen San Gil, Barbosa, Socorro, Cimitarra, Sabana de Torres, Vélez, San Vicente de Chucurí, Rionegro, Málaga y Curití. En el área metropolitana de Bucaramanga, de los 11 homicidios registrados, 10 tienen como causa principal la intolerancia.Arenas enfatizó que, a diferencia de otras regiones del país, Santander no enfrenta amenazas de grupos armados organizados con control territorial, como el ELN o las disidencias de las Farc. “El problema no es externo; somos nosotros mismos los que nos estamos haciendo daño. Debemos cambiar esta cultura de la violencia y aprender a resolver nuestras diferencias de manera pacífica”, concluyó.
Este jueves 16 de enero se registró un ataque con explosivos contra una unidad de la Policía Nacional en zona rural de Cúcuta. Un intendente, de apellido Morales y el patrullero Contreras, resultaron lesionados mientras se desplazaban entre Cúcuta y Puerto Santander. A la altura del corregimiento Buena Esperanza se activó la carga explosiva, lo que ocasionó la afectación de estas personas.Por la explosión, los oficiales fueron trasladados a una clínica privada y, de acuerdo con las autoridades, este ataque iba dirigido exactamente contra el grupo de operaciones especiales de la Policía Metropolitana de Cúcuta. Hay que decir que en la zona delinque el ELN, por lo que las autoridades están desplegadas en la zona para evitar hostigamientos.En desarrollo.