A pesar de los desperdicios, la contaminación y el mal trato que se le da al río Bogotá, la docente investigadora de la facultad de ciencias ambientales de la UDCA, Loreta Rosselli, aseguró en Vive Bogotá que realizaron el hallazgo de aves y especies acuáticas que habitan a lo largo de esta fuente fluvial.
“Encontramos una diversidad importante con respecto a aves, que es lo que estudiamos con más detalle, encontramos cerca de 100 especies a lo largo del río y 30 de esas acuáticas”, indicó añadiendo que la mayoría se encuentran en la parte alta del río, entre Villa Pinzón y el municipio de Cota.
Rosselli explicó que el estudio consistió en fijar 18 puntos a lo largo del río, de los cuales el grupo de investigación visitó seis durante año y medio y en diferentes épocas climáticas y migratorias del año, con la ayuda de grabaciones y binóculos que les permitieron descubrir aves como la tingua de pico verde o tingua moteada, garzas y patos canadienses.
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“Esto demuestra que el río no estaba tan muerto como se creía, hay una buena esperanza de conservación en el rio y es el momento de actuar porque todavía hay mucho por recuperar”, reflexionó.
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Por último, advirtió que el río tiene presencia de metales pesados desde antes de Villa Pinzón y a lo largo del curso, lo que genera un problema grave de salud pública.