Espionaje fue ineludible pero legal: adelanto de informe del Ejército a Santos

Blu Radio conoció un adelanto del informe que la Inspección del Ejército entregará al presidente Juan Manuel Santos y en el que negará interceptaciones ilegales en la operación ‘Andrómeda’ .

El sentido del informe que conoció Mañanas BLU revela, entre otras cosas, que desde finales del 2011 funcionaba una oficina de fachada de inteligencia del Ejército en Galerías y que allí se reclutó a un grupo de jóvenes para poder descifrar mensajes obtenidos a través de un monitoreo del espectro electromagnético.

El documento señalaría que para esos seguimientos no se necesita orden judicial y que en ningún momento se hizo interceptación de llamadas telefónicas.

Según conoció Blu Radio, las Fuerzas Militares tienen instaladas en el país al menos 30 de estas oficinas de fachada para hacer inteligencia informática, cinco de ellas en Bogotá.

La conocida como ‘Andrómeda’, camuflada en un restaurante y centro de inteligencia en el corazón de Bogotá, tenía la misión de hacer seguimientos a las Farc porque se tenían pistas de que este grupo quería cambiar su estrategia para realizar acciones terroristas en el centro del país.

De acuerdo con fuentes militares, ese seguimiento o monitoreo del espectro hizo ineludible que se rastrearan correos, conversaciones de Whatsapp y chats cruzados entre miembros de las Farc en todo el país e incluso algunos de los que hoy son negociadores de las Farc en cuba. Por esa razón, el Ejército no reconocería ilegalidad en estas operaciones. 

A través de estos monitoreos se pudieron establecer, por ejemplo, los movimientos de guerrilleros claves como Mauricio Jaramillo alias ‘El Médico’, ‘Carlos Antonio Losada’ y ‘Fabián Ramírez’.

El informe apuntaría además que las Farc son las que están reclutando de manera ilegal jóvenes para infiltrarlos a redes informáticos y comenzar una especie de guerra informática con las fuerzas de inteligencia del Estado.

El Ejército entregará estas y otras conclusiones este mismo viernes al presidente Juan Manuel Santos, quien, no obstante, ya conocería estos adelantos y por eso pidió a la Procuraduría adelantar las investigaciones disciplinarias en el caso.